Insólito: el auto de carreras autónomo que “se suicidó” contra un muro

Los sistemas de conducción autónoma se están desarrollando para mejorar la seguridad en calles, avenidas y rutas. Pero también hay gente que piensa que es posible aplicarlos en autos de carrera.

La Roborace, la primera categoría de autos de competición sin pilotos, celebró su primer evento en el circuito inglés de Thruxton con un desenlace inesperado.

Uno de los autos que salió a pista frenó de repente en plena recta principal para después acelerar, doblar y estrellarse contra el muro de la calle de boxes.

En la Roborace participan vehículos autónomos con equipos provenientes de Reino Unido, Italia, Austria, Suiza y los Estados Unidos. La transmisión de la carrera se hizo por la plataforma Twitch.

Y aunque se trate de una "Temporada Beta", por estar todavía en una fase experimental, no es la primera vez que el Roborace pasa por una situación similar, ya que en otra demostración pública, ya había tenido un experimento fallido.

Y fue en la ciudad de Buenos Aires, cuando en febrero de 2017, en el contexto de una fecha de la Fórmula E que se corría en Puerto Madero, una demostración terminó en accidente.

Aquella había sido la primera demostración dentro de un evento público. Dos autos salieron a la pista adaptada que recorría parte de Puerto Madero y de la Costanera Sur.

Durante su recorrido pudieron alcanzar velocidades máximas de 186 km/h, hasta que el segundo vehículo se terminó estrellando contra las defensas que protegían la fuente de Las Nereidas de Lola Mora.

Uno de los ingenieros que trabaja en este proyecto salió a explicar los motivos de por qué se produjo un nuevo accidente con el inicio de la categoría.

Según publicó en Reddit, "la falla real ocurrió mucho antes del momento del choque, en la vuelta de inicialización". Y explicó que "la vuelta de inicialización está para llevar el auto de boxes a la línea de salida y que es conducido por un conductor humano durante esa vuelta. Se trata de un procedimiento estándar de Roborace".

Durante esa vuelta, "sucedió algo que aparentemente hizo que la señal de control de la dirección se bloqueara al valor máximo a la derecha. Cuando a nuestro auto se le dio permiso para conducir, el comando de aceleración fue normal pero la dirección se bloqueó a la derecha".

En resumen, hubo una falla que terminó bloqueando la dirección hacia la derecha, pero que "el auto definitivamente no planeaba chocar contra la pared".

La última aparición en un evento público del DevBot 2.0, como se conoce a la evolución de este auto sin piloto, había sido el año pasado, cuando completó la tradicional subida a Goodwood, en Inglaterra.

El proyecto de la Roborace se había anunciado en 2014, pero fue sufriendo distintos retrasos. Y cuando finalmente se puso en marcha, un nuevo percance indica que todavía quedan unas cuantas horas de pruebas para que pueda brindar el vértigo de una carrera con pilotos, si es que alguna vez lo logra.