Exportar a China de la mano de expertos

Brand Studio para ICBC

Tener la posibilidad de entrar en contacto con compañías chinas es muy importante para los empresarios argentinos que buscan exportar sus productos. Este país representa una de las mayores economías del mundo, con un mercado que cada vez requiere más productos occidentales.

ICBC hace posible posible el acercamiento con este gigante comercial a través del premio ICBC Comercio Exterior, una iniciativa que busca fortalecer la cooperación económica entre China y Argentina. Desembarcar en el país asiático de la mano de ICBC es un sueño para cualquier empresario argentino que quiera que sus productos encuentren compradores en el exterior.

Lapacho Azul nació en Tucumán y se dedica a la producción de frutas cítricas. Fue la ganadora de la última edición del premio, en la categoría Medianas Empresas. Gracias a este incentivo, pudieron concretar un viaje a China en el que se reunieron con potenciales clientes, aprendieron sobre la cultura del país y recorrieron puertos y mercados para conocer de lleno los procesos de traslado y venta de los productos que comercializan.

“Siempre nos gusta presentarnos a premios. Creemos que es muy bueno para generar incentivos, es bueno el reconocimiento y poder contar lo que uno hace. Por supuesto, si ganás, la motivación es mucho mayor”, comentó Walter Ojeda, responsable comercial de Lapacho Azul.

Por eso, cuando se enteraron de la convocatoria para el premio ICBC Comercio Exterior no dudaron en anotarse. No sabían qué probabilidades tenían de ganar, ya que desconocían quiénes eran los competidores, pero confiaban en su producto; y eso les daba esperanza.

“Estamos orgullosos de lo que hacemos. Vemos los resultados cuando nuestra producción llega a destino, con la clasificación que nos dan nuestros clientes. Hacemos un producto de buena calidad, que es perecedero, por lo que es importante la logística y la conservación, para que no se pierda la cadena de frío. Por cada embarque que enviamos hay un reporte de calidad, y eso da cuenta de que hacemos las cosas bien”, describió Ojeda.

Una buena noticia

La noticia de que eran los ganadores llegó en febrero. Los directivos estaban en Alemania participando en una importante feria, cuando sonó el teléfono. En diciembre habían recibido una visita de ejecutivos de ICBC para conocer mejor la empresa, y eso ya les dio un indicio de que tenían buenas chances. Pero la confirmación telefónica fue una gran alegría.

Después de definir las fechas para el viaje a China, empezaron las charlas de inducción y organización de las agendas. “Fue todo sumamente profesional. Tanto ICBC como Fundacion ICBC, tiene mucha experiencia y contactos. Entonces les dijimos qué nos gustaría conocer, y con quiénes esperábamos tener reuniones. También explicamos que nos interesaba saber cómo se manejaba la fruta en el puerto y los mercados. A partir de eso, nos armaron la agenda. Hubo también un feedback con interlocutores argentinos que están haciendo negocios con China y nos contaron qué tener en cuenta para las reuniones”, detalló Ojeda.

El empresario quedó sorprendido por la cultura del país asiático. Destacó la importancia de la preparación previa de la mano del Banco y de Fundacion ICBC para llevar adelante las reuniones. "China es una economía muy potente. Por eso es importante conocer su cultura y a partir de ahí se puede armar la estrategia comercial. Es un pueblo muy amable y con mucho formalismo”, explicó.

El apoyo de ICBC, fundamental

Lapacho Azul ya tenía algunos clientes en China y por eso había viajado en otras oportunidades. Pero esta vez fue distinto. Tuvieron la oportunidad de llevarse una visión más amplia del país entender su cultura. Visitaron cadenas de supermercados, conversaron con sus gerentes. Vieron cómo se vende la fruta en distintos mercados.

Pasaron por el puerto y obtuvieron una idea más global del negocio. Además de las reuniones con potenciales clientes, tuvieron contacto también con el sector público argentino. Fueron a conocer las embajadas y quedaron en contacto con distintos funcionarios.

Todo fue mucho más fácil gracias a la ayuda de los intérpretes. Según destacó Ojeda, estaban muy preparados y formados en el negocio. “Los ejecutivos a de ICBC nos acompañaron a todas las reuniones. Fue una muy buena carta de presentación. Sin el banco ICBC , en algunos lugares no nos hubieran prestado atención”, indicó Ojeda.

Las tratativas con los posibles clientes continúan. A esta altura del año ya terminó la campaña y las puertas están abiertas para concretar el negocio el año que viene. “Esto necesita tiempo”, explicó Ojeda, quien se mostró muy satisfecho con las conversaciones que se están llevando a cabo gracias a la ayuda de ICBC.