“La lógica ausencia de una necesaria fe”

Vivimos un tiempo de adicciones, no todas relacionadas con las drogas. Padecemos casi como una patología social endémica una gran necesidad de personas creíbles dignas de ser ejemplos.

Advertimos la escasez de personajes en el ámbito público moralmente rescatables. Estamos sometidos de modo imperceptible a una realidad politizada. Padeciendo diversos tipos de violencia: para sublevarse contra una dominación, la física y psíquica, la familiar, laboral, violencia gobernante, y la oral y visual. Las sucesivas decepciones personales que padecemos nos han impulsado a “la lógica ausencia de una necesaria fe”.

Esa fe debilitada de modo temerario propicia las creencias de credulidades baratas y ocasionales, como sustitutos fugaces. En épocas de mentiras, inseguridad, incumplidas promesas y la obtención de beneficios individuales por sobre los colectivos, sobrevivimos esperanzados en que la obviedad reemplace algún día la triste actualidad.

El dilema pasa por convencernos de que todos se aprovechan de un futuro ignorado. Revelando que la especulación del hombre sobre el destino siempre está condicionada por los intereses de cada persona, o de cada grupo como queda demostrado. Consejo:de vez en cuando hay que decir la verdad, para que te crean cuando mientes.

Norberto D. Ivaldi / norbertoivaldi@gmail.com

Las prepagas y los aumentos “salvajes” en las cuotas

Los incrementos de las cuotas de las prepagas han superado todas la previsiones sobre los resultados de la desregulación de la economía. Pero los límites a esa libertad para aumentar sus precios lo fijan las posibilidades de los usuarios, cuyos ingresos en una época de crisis con la gravedad de la que afecta al país, se reducen inexorablemente.

La magnitud de los incrementos entre diciembre de 2023 y marzo 2024 dice que no hay piedad con la salud de los adultos mayores. Y si tal circunstancia no es considerada a la hora de fijar incrementos de las cuotas, las empresas habrán perdido el concepto del valor de la vida humana y poco podrá esperarse de ellas en el futuro, en la calidad de los servicios de atención de la salud.

Víctor La Pietra / lapietrav-@hotmail.com

Aún ante el aumento salvaje que están aplicando la prepagas, el presidente de la asociación que las nuclea dijo abiertamente que las prepagas existen solamente para dar servicios a la “gente acomodada”, así como también había dicho que seguramente el 30% de los afiliados se caerán del sistema.

Es evidente que estas declaraciones son coherentes con la política de esas empresas de seguir recortando servicios, pagando mal y tarde a los médicos, perdiendo profesionales que dejan de atender afiliados, etc., para transformarse en entidades de lujo para sólo unos pocos. Pero yo me pregunto, si, ¿será el sistema público de salud suficiente para atender a la cantidad de personas que se caerán de la prepagas?

No encuentro explicación alguna a incrementos que superan el 100% en tres meses, como si la inflación no estuviera haciendo lo suyo con los jubilados, como es mi caso.

Juan Carlos Ruano / ruanojcar@gmail.com

El Presidente y los choques con algunos gobernadores

La discrepancia por cuestiones económicas está llevando a un enfrentamiento entre el Gobierno y varias provincias. Ya es hora que se le otorgue prioridad al consenso: la mayoría de los ciudadanos esperanos esto.

Carlos Alberto Castriota / ccastriota2004@yahoo.com.ar

Propone un proyecto para las obras públicas

Preocupa que el Gobierno para evitar gastar haya suspendido las obras públicas. Pero hay un camino que lo soluciona usando el concepto: PPP: Proyectos Publico Privados en los que el Estado no pone dinero, sólo controla las ejecuciones de obras.

Ejemplo: Proyecto de la Red Federal de Autopistas de 13.400 km que une 1.051 localidades y se financia con pocos centavos por litro de combustible utilizado en 30 años. Las empresas adjudicatarias de las obras deberán realizarlas a su costo, proveerán su mantenimiento y, obtendrán sus ganancias con esa fórmula. Así de simple. El Estado no interviene, solo controla. Este es el proyecto insignia de nuestro grupo, seguidores del gran pensador Guillermo Laura que nos abandonó en julio.

Ricardo Olaviaga / rolaviaga157@gmail.com