Ganaron un concurso y subieron a la torre más alta de la Ciudad

Fue un puñado de afortunados que pudo disfrutar de una vista inigualable. Doscientos vecinos conocieron hoy a Buenos Aires desde su punto más alto. Con una mañana de sol impecable, entre las 8 y las 11, fueron subiendo en cinco grupos de 40 personas a la cúspide de la torre del Parque de la Ciudad. Llegaron hasta ahí a través de un sorteo que hizo el Gobierno porteño por las redes sociales.

"Hace dos semanas lanzamos la convocatoria. En tres días hubo casi 15 mil inscriptos. Se eligieron 200 lugares y algunos más para suplentes", dijo el subsecretario de Comunicación, Federico Di Benedetto a Clarín. Esta mañana siguió "el ascenso" junto al jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta y el vice, Diego Santilli.

Con sus 200 metros de altura, el equivalente a tres Obelisco, la torre es la estructura más alta de la Argentina. Está ubicada en el ex Parque de la Ciudad -antes Interama-, en avenida Fernández de la Cruz 4040, Villa Soldati. A sus pies están la montaña rusa abandonada, el pulpo mecánico oxidado y los esqueletos de otros juegos importados de Europa para el Disney que no perduró.

Mil peldaños de hierro antideslizante y 45 descansos tiene la escalera que llega a su punta. Por suerte funcionan dos ascensores, para 26 personas cada uno, que viajan en un minuto desde la planta baja hasta el mirador, tan rápido que los oídos zumban. 

Durante la experiencia guías turísticos acompañaron a los vecinos. Les explicaron, por ejemplo, que la torre emula una gigantesca Excalibur clavada en 25 metros de  tierra, que en los días claros se puede ver hasta la costa uruguaya, que la mole fue construida en Australia y traída en barco en 1978.

La cima es exagonal y está cubierta de ventanas. Ofrece una panorámica de 360 grados en la que se puede divisar el puente de La Boca, las chimeneas de la Central Costanera, el Río de la Plata, los rascacielos de Puerto Madero y el complejo Lugano, entre otros paisajes y contrastes urbanísticos. 

"Vi el autódromo, el Parque Roca, la construcción de la futura Villa Olímpica y mucha arboleda", dijo Silvia Sandor, vecina de Villa Lugano. La última vez que había visitado el parque fue en 1983 embarazada de su hijo menor y con su hija a upa. "Pensé - siguió- que después de tantos años estaba abandonado y encontré un lugar muy lindo, al que se puede ir un fin de semana en familia". Christian Morales también tenía otro recuerdo. Había conocido el mirador a sus 15 años -hoy  tiene 44-, en pleno funcionamiento de Interama, la aventura colectiva para aquellos que crecieron entre 1960 y 1990. "Sentí mucha nostalgia, pero lo disfruté. Esta vez me dediqué a buscar la cancha de San Lorenzo, las grúas del puerto y llegué a divisar el movimiento de aviones en Ezeiza", dijo. Sobre los vidrios del mirador hay señalética que indica la ubicación de complejos deportivos, el trazado de la 9 de Julio, el Obelisco, Puente La Noria, Parque Chacabuco, Parque Avellaneda y otros puntos. 

Si bien los vecinos esta mañana conocieron la torre gratis, puede visitarse todos los fines de semana y feriados desde las 10:30 hasta las 18. La entrada cuesta $ 10 y el ingreso al mirador $ 60. Los jubilados, menores de cinco años, contingentes escolares y personas con alguna discapacidad no abonan entrada, pero sí un pase de $ 30 a la cima. 

Por consultas, comunicarse de lunes a viernes de 10 a 16 al 54 (11) 3706-1753 o escribir a parquedelaciudad@buenosaires.gob.ar.