Otro insólito arbitraje en la Primera Nacional: dos compañeros se hicieron un foul entre sí y cobraron penal

La insólita jugada que cada fin de semana tiene reservado el ascenso argentino pasó este viernes en Puerto Madryn. En los datos, Guillermo Brown le empató a Talleres de Remedios de Escalada 1-1 por la fecha 9 de la Primera Nacional. Pero el tanto de la igualdad de los locales llegó después de la sanción de un penal, de mínima, polémico.

Es que el árbitro Yamil Possi determinó la pena máxima a los 75 minutos de partido cuando un jugador de Guillermo Brown le cometió infracción a su propio compañero. Sí, a uno que tenía su misma camiseta e intentó saltarlo dentro del área.

La incredulidad de los futbolistas del conjunto del conurbano bonaerense fue tal que apenas se llevaron las manos a la cabeza y poco pudieron protestar, después de la supuesta recomendación que bajó de las máximas autoridades de la AFA a partir de la ola de quejas por el desempeño de los hombres de los silbatos.

Matías Donato había adelantado a Talleres en el arranque del segundo tiempo, hasta que en el último cuarto de hora llegó el desenlace.

El visitante Alexis Nicolás Monserrat fue a trabar al piso una pelota con Cristian Gorgerino. Al mismo tiempo apareció en escena el paraguayo Hugo Sandoval, quien intentó saltar a ambos pero terminó golpeando a su propio compañero. Para Possi, a escasos metros de la jugada, eso fue penal y Renso Pérez colocó el 1-1 después capturar el rebote que el arquero Damián Tello le había detenido al remate inicial.

La semana pasada, Guillermo Brown había sido claramente perjudicado en su visita a Quilmes.

El otro encuentro de este viernes también terminó 1-1, a partir de la agónica igualdad que consiguió Agropecuario en Carlos Casares frente a Quilmes, que si bien sigue invicto, podría perder el liderazgo a manos de San Martín de San Juan, que el domingo recibe a Estudiantes de Caseros.