Papelón con hinchas que tenían entradas para ver a la Selección frente a Uruguay y no pudieron ingresar a La Bombonera

El plan era perfecto. Tenía plateas para ver con su hijo y un grupo de amigos a Lionel Messi en acción, con la camiseta de la Selección y frente a Uruguay por las Eliminatorias. Pero al llegar a La Bombonera, la pasión y expectativa se convirtió en indignación: no pudieron ingresar al estadio porque las puertas ya estaban cerradas. Y tuvieron que volverse sin que les dieran siquiera una explicación.

"Soy un damnificado junto a otros cuatro, incluido mi hijo, que compramos las entradas para este partido y nos dejaron afuera", empieza a contar Roberto la situación que vivió.

Y sigue: "Llegamos 10 minutos antes del partido medio a las corridas porque estaba cerrada Pinzón y tuvimos que caminar como 15 cuadras para entrar por el otro lado. Teníamos plateas preferenciales, que costaban $ 130.000, y nos dejaron afuera. Cerraron la puerta y la Policía valló dos cuadras alrededor. Cerraron todo".

Roberto y su grupo no fueron los únicos afectados. Más hinchas se quedaron con sus entradas en la mano y las ganas de ver a los campeones del mundo en La Bombonera.

"Había toda personas de buena fe. Gente del exterior, turistas, gente en silla de ruedas. Un desastre", remarca.

Desde el Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires le explicaron a Clarín que la demanda había superado largamente la capacidad del estadio de Boca: "Se trató de un operativo muy complejo porque había desde temprano mucha gente que se acercó a los alrededores del estadio".

Y completaron: "El aforo en la cancha de Boca es de 57.000 personas. Una vez que entró esa cantidad de gente, la organización decidió cerrar las puertas del estadio. Por eso es que quedaron algunos hinchas sin poder ingresar".

Resta saber si hubo sobreventa o si los controles no fueron eficaces para rechazar el ingreso de aquellos que se acercaron sin tener su ticket correspondiente.