Estrenó en Netflix Pollitos en fuga: el origen de los nuggets y es una película familiar, no infantil

Pollitos en fuga: el origen de los nuggets, que acaba de estrenar Netflix, no es una película infantil: es una película familiar, que no es precisamente lo mismo.

Para aquellos adultos (o niños) que disfrutaron a más no poder la primera Pollitos en fuga, estrenada en el año 2000, volver a ver a la gallina Ginger y el gallo Rocky, más la malvada, la Señora Tweedy, es más que un viaje nostálgico, gracias a que El origen de los nuggets es una película independiente de la original.

OK, para quienes no la vieron, hay una introducción para saber cómo fue que Ginger y Rocky se fugaron de la granja de la villana Señora Tweedy. Ahora viven en Chicken Island, relativamente un paraíso no demasiado lejos de la granja que era como un campo de concentración. No les falta comida (hasta hacen pochoclo utilizando una lupa para que el sol lo cocine) y no hay ningún humano.

Ginger y Rocky han tenido una pollita, Molly, a quien Rocky le cuenta su aventura de huida. Y Molly está decidida a vivir la experiencia de primera mano. Saldrá de ese lugar impoluto para vivir su vida. Se cruza en el camino con una gallina llamada Frizzle, y sin advertir son adormecidas y enviadas a Fun-Land Farm.

Es como llegar a Disney. Hay juegos, y comen y beben a más no poder. Un pequeño detalle es que las gallinas tienen en su cuello un dispositivo.

Caramba.

Pero esa granja multicolor por dentro, es como donde vive Truman en The Truman Show. Todo es ficticio. Por más que tengan juegos mecánicos, toboganes y escaleras que conducen al cielo pintado, por fuera es acero puro y tiene alambre de púas. Y sí, la idea de Tweedy es convertir a las gallinas en nuggets y venderlas a una casa de comida rápida...

Cuando Ginger y Rocky descubran que Molly se fue, reunirán a un escuadrón de gallinas para ir al rescate de Molly. ¿Van a volver a esa tierra, donde la pasaron tan mal?

Sí, todo sea por su hijita.

La película tiene además de un humor ingenuo, muchas referencias cinéfilas -la mencionada del filme con Jim Carrey, a Misión: imposible- y hasta permite plantear si Ginger, al no querer que su hija salga al exterior, no se convirtió en una suerte de carcelera.

Ya no están los directores de la primera de la productora Aardman, Peter Lord y Nick Park, pero el realizador Sam Fell continúa con la mejoría en la animación stop motion, de Wallace & Gromit y de El extraño mundo de Jack, por ejemplo.

Y bueno, tampoco están Mel Gibson y Julia Sawalha, y ahora las voces de Rocky y Ginger son las de Zachary Levi y Thandiwe Newton. La joven Molly tiene la voz de Bella Ramsay, la actriz de Game of Thrones (era Lyanna Mormont) y The Last of Us.

Resumiendo, Pollitos en fuga: El origen de los nuggets es divertidísima, repite algún clisé que muchos podrán ver como guiños, dura casi 20 minutos más que la original, por lo que hay más diversión por la misma plata que uno abona la cuenta de Netflix.

“Pollitos en fuga: el origen de los nuggets”

Muy buena

Comedia animada. Reino Unido / Estados Unidos / Francia, 2023. Título original: “Chicken Run: Dawn of the Nugget”. 101', ATP. De: Sam Fell. Con las voces originales de: Thandiwe Newton, Zachary Levi, Bella Ramsay, Miranda Richardson, Imelda Staunton. Disponible en: Netflix.