Noticias hoy
    En vivo

      Moris cumple 80 años: el autor de “El oso” que unió la rebeldía rockera y la poesía de la calle

      Nació el 19 de noviembre de 1942. Desde mediados de los años '60 creó un estilo que fue un faro para el rock argentino. Las siguientes generaciones lo han revalorizado y es un clásico que sigue activo.

      Moris cumple 80 años: el autor de "El oso" que unió la rebeldía rockera y la poesía de la calleMoris en su presentación del 2021 en el Centro Cultural Kirchner. Foto Gentileza Prensa CCK/Manuel Pose Varela

      En la historia del rock mundial hay unos pocos pioneros que dieron forma a todo lo que vino después. No sólo sentaron las bases musicales, letrísticas y conceptuales, sino que las crearon de cero y con viento en contra. En Argentina, entre el puñado de creadores locales sin duda que se encuentra Moris.

      El rock argentino se distingue por ser una voz distintiva y propia de sucesivas generaciones, con todo el despliegue de sus sueños, frustraciones y ideales. Es la voz de la rebeldía y del primer amor, de la fascinación y el desencanto, de la impotencia ante el reiterado "¡No!" del mundo de los adultos, de la inocencia y la inocencia perdida.

      Todo ese manojo de elementos fueron desplegados magistralmente por Moris en apenas un disco simple y un álbum propiamente dicho. Luego volvió a tocar el cielo con más canciones inmortales, siempre dentro de esa matriz que él mismo inventó.

      Y hasta repitió el truco en España, donde prácticamente enseñó a cantar en español, dejando de lado las imitaciones y traducciones burdas del rock anglosajón.

      Moris en 2016, cuando celebró los 50 años del simple "Rebelde". Foto: Pepe Mateos.Moris en 2016, cuando celebró los 50 años del simple "Rebelde". Foto: Pepe Mateos.

      Si el mundo musical donde se desarrolló el rock argentino era un enorme descampado o camino lleno de malezas, Moris y unos pocos más (Javier Martínez, Litto Nebbia, Tanguito, Pipo Lernoud) lograron hacer un pequeño camino de tierra que conducía a un mundo nuevo. Al principio sólo lo transitaban unos pocos, pero hoy ese caminito se convirtió en una enorme y amplia autopista con cabinas de peaje y colectoras, millones de fans y miles de protagonistas.

      Todo gracias a Moris.

      Cuando todo era nada

      Mauricio Birabent se ganó un nombre en los libros de historia con su apodo, que surgió simplemente de jugar con la pronunciación en francés de "Mauricio". O sea "Maurice", que se pronuncia "Moris", justamente.

      No era un pequeño adolescente cuando se embarcó en el mundo de las canciones, sino que ya tenía más de 20 años, mucha calle y hasta experiencia laboral. Su psiquis acusó el impacto hormonal del primer rock and roll estadounidense y el shock creativo de los Beatles.

      Se sumergió en la literatura beat y los nuevos movimientos de la cultura popular. No en vano, su primera y única banda (luego siempre fue solista) se llamó Los Beatniks.

      Un muy joven Moris. Foto archivo Clarin.Un muy joven Moris. Foto archivo Clarin.

      Su curiosidad y espíritu aventurero lo llevó a explorar de primera mano el mito de una tierra prometida en Villa Gesell, donde chicas y chicos se metían desnudos en el mar. Una fantasía basada en el film Los jóvenes viejos, que apenas insinuaba algo parecido, pero en aquella sociedad conservadora y pacata parecía revolucionario sacarse solamente las medias y los zapatos para meterse en el Atlántico.

      Tan emprendedor como inconsciente, Moris montó un bar en Gesell, el mítico Juan Sebastián Bar, donde comenzó a tocar en vivo con unos amigos, incluso con Javier Martínez en batería. Ese fue el germen de Los Beatniks y de todo lo que se convertiría en el rock argentino.

      Ya de regreso a Buenos Aires, con una nueva formación, lograron grabar un single que bien podría considerarse la piedra fundacional, la Rosetta del rock local. Ahí estaba la canción Rebelde, con gritos, aullidos y una letra diametralmente opuesta al rock frívolo y pasatista de El Club del Clan & Cía.

      Vale la pena repasarlo, porque no fue un hit ni mucho menos. Apenas una anécdota para arqueólogos, pero relevante desde cualquier punto de vista.

      "Rebelde me llama la gente, rebelde es mi corazón, soy libre y quieren hacerme esclavo de una tradición / Todo se hace por interés, pues este mundo está al revés. Sí todo esto hay que cambiar, siendo rebelde se puede lograr / ¿Por qué el hombre quiere luchar, aproximando la guerra nuclear? Cambien las armas por el amor y haremos un mundo mejor".

      El lanzamiento de Los Beatniks, en 1966.. Foto archivo ClarinEl lanzamiento de Los Beatniks, en 1966.. Foto archivo Clarin

      El mito de Los Beatniks se agiganta con un legendario lanzamiento que fue todo un happening, impactante pero infructuoso. Gracias al ingenio de otro personaje clave llamado Pajarito Zaguri, recorrieron la avenida Corrientes tocando sobre un camión (décadas después Andrés Ciro repitió el hecho casi como homenaje) y confabularon con el dueño del diario Crónica protagonizar un escándalo (meterse desnudos en la fuente de Suipacha y Arroyo) para salir en tapa.

      El legendario álbum debut

      Moris y su disco "Treinta minutos de vida".Moris y su disco "Treinta minutos de vida".

      Tras el fallido intento de conseguir difusión con Los Beatniks, Moris inició una carrera solista que se desarrolló durante más de 50 años y que sigue bien activa, últimamente subiéndose al escenario junto a su hijo Antonio para hacer un repertorio en conjunto.

      Si bien los recitales eran pocos y el público era muy pequeño, la escena fue creciendo de 1966 a 1969, primero aritméticamente y luego geométricamente. A pesar de las restricciones de la dictadura, había lugares para tocar y hasta los primeros festivales anuales. Así, a la solitaria labor de Los Gatos pronto se sumaron Manal, Vox Dei, Almendra, Arco Iris y los solistas Miguel Abuelo y Tanguito.

      En ese círculo, Moris ya era una leyenda, y cuando apareció el primer sello discográfico independiente (ante la negativa de las empresas establecidas) no hubo duda en ficharlo para un simple y luego un álbum.

      Moris, tras descubrir la placa que recuerda el mítico Juan Sebastian Bar del verano de 1965-1966. Foto: Gustavo FazioMoris, tras descubrir la placa que recuerda el mítico Juan Sebastian Bar del verano de 1965-1966. Foto: Gustavo Fazio

      Así, en 1969 salió el single con El oso / Escúchame y en 1970 el long-play Treinta minutos de vida, donde estaban canciones como De nada sirve, Pato trabaja en una carnicería, Ayer nomás y Escuchame entre el ruido.

      Experimental por momentos, simple e ingenuo en otros tramos, el álbum destila todo ese compendio de frescura, inocencia​, frustración, rebeldía, fascinación y desencanto. El ABC del rock argentino en apenas -para ser precisos- 33 minutos de canciones.

      Si bien es un solista con su guitarra, lo acompañan figuras como Claudio Gabis, Javier Martínez y Pappo. Moris consiguió que cada tema tuviera su universo sonoro perfecto, que es justamente lo que lo convirtió en atemporal, más allá de las modas musicales del momento.

      Los años '70

      Una característica de la obra de Moris es que jamás siguió los dictados de la industria discográfica, que exigían lanzar un disco por año. No dudó en tomarse su tiempo y sólo avanzar cuando se sentía satisfecho con lo que tenía compuesto.

      Su segundo opus salió en 1974 y también es una maravilla, con un sonido más grupal, sofisticado y eléctrico. Se llamó Ciudad de guitarras callejeras y traía canciones como la pintura costumbrista de El mendigo del Dock Sud y la épica monumental de Muchacho del taller y la oficina.

      Una foto histórica de Moris con la guitarra eléctrica en vivo.Una foto histórica de Moris con la guitarra eléctrica en vivo.

      Pero no era fácil hacer rock en aquellos tiempos de poca difusión en los medios y muchas restricciones policiales. Una bomba antes de un recital fue el contundente mensaje que significaba que debía hacerle caso a la premonitoria letra de la última canción de aquel segundo disco: De aquí adónde iré.

      El destino fue España, que apenas comenzaba a despertarse de tantos años de dictadura de Francisco Franco. Pero había nuevas posibilidades y muchas ganas, tanto que Moris sobresalió en la escena y consiguió un sello independiente (¡cuándo no!) para sacar un nuevo disco.

      El resultado prácticamente cambió la historia del rock español. Aquel Fiebre de vivir combinaba el rock and roll de fines de los años '50 (Sábado noche) con canciones que repetían con maestría el truco de retratar a una ciudad: Nocturno de Princesa y La ciudad no tiene fin.

      Esta vez, Moris no sólo logró marcar a fuego el rock de un país, sino que tuvo un éxito descomunal. Actuó en plazas de toros, festivales y programas de televisión. Coronó esta etapa con Mundo moderno, luego dio un show en Buenos Aires llamado Las Obras de Moris y volvió a la experimentación sonora con el poco comprendido Dónde están las canciones (en España llamado 13 mujeres).

      Silencios y retornos

      Moris junto a su hijo Antonio Birabent en 2011, cuando sacaron el exquisito disco "Familia canción".Moris junto a su hijo Antonio Birabent en 2011, cuando sacaron el exquisito disco "Familia canción".

      Desde su regreso al país a fines de los años '80, Moris dosificó sus apariciones públicas y lanzamientos discográficos. No consiguió buena difusión con Sur y después (que merecía mejor suerte) ni sus Cintas secretas, pero en dos oportunidades recibió un apoyo de amor por parte de su hijo Antonio, sacaron un disco juntos e hicieron shows.

      Cualquiera que haya visto en vivo a Moris no puede dejar de sentir la presencia de un artista único, con una voz inolvidable y gestos escénicos propios de un grande. Un creador único, excéntrico e innovador. No se lo pierdan.

      MFB


      Sobre la firma

      Marcelo Fernández Bitar

      Periodista. Crítico de rock. Autor de los libros “50 años de rock en Argentina”, “Soda Stereo, la biografía total” y “La vida secreta del rock argentino”. Editor de música en Clarín Espectáculos. Diploma al mérito premios Comunicación-Periodismo de Fundación Konex 2017.

      Bio completa

      Tags relacionados