Las automotrices, interesadas en el bono para los importadores

¿Quiénes serán los principales suscriptores del bono que anunció Alfonso Prat Gay, para compensar la “deuda vencida” de los importadores”? Sin duda, las terminales automotrices están al tope de la lista: en conjunto, las fábricas agrupadas en la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA) mantienen una deuda de 3.200 millones con sus casas matrices. El bono, analizaban hace pocos minutos en dos de las terminales con deudas más abultadas, les representa el comienzo de la normalización de esa deuda. 

Un detalle, que todavía no se conoce, es a cuánto va a ser ofrecido ese bono. En buena medida, ese valor de referencia será el que defina la adhesión que tendrá entre las compañías, y entre ellas las terminales automotrices son las más interesadas.

“Vamos con los bonos”, dijeron en una de las compañías, de origen europeo, que está endeudada en casi 400 millones de dólares con su casa matriz.

“Esto puede ser una solución”, agregaron en otra de las terminales. “Estamos analizando detalles, pero parece ser una buena opción para la deuda vencida”.

¿Cómo se contrajo esa deuda? Al comienzo del cepo, cuatro años atrás, las automotrices seguían importando dos tercios de los vehículos que vendían en el mercado interno y, por otro lado, exportaban un 60% de lo que producían en sus fábricas. Los vehículos importados se pagaban, y se siguen pagando, con dólares que les vende el Banco Central y que, a su vez, pagan con los pesos que las concesionarias les pagaron con los vehículos. A medida que el cepo se fue haciendo más rígido, ese acceso a los dólares se hizo más restringido y la cuenta corriente con las casas matrices pasó del azul al rojo, y de ahí a un bloqueo: en casi todas las empresas, llegó un punto en que se les dijo no va más y no les volvieron a habilitar nuevos autos si no iban pagando deuda vieja. Pero como la dinámica comercial seguía siendo importante (este año se vendieron 630.000 vehículos, la mitad importados, aun con el cepo a full) la deuda siguió creciendo hasta los US$ 3.200 millones actuales.