Macri, a los industriales: “Inviertan porque confían, no para hacerme un favor”

“Todo esto que hicimos para simplificar y quitar burocracia le ahorró a la industria 2.700 millones de pesos por año. ¡Pueden aplaudir! ¿O pretenden que esté todo el discurso sin tomar agua?”. La broma que lanzó el Presidente, y que despertó risas y aplausos de aprobación entre los empresarios, fue una de las tantas escenas que dieron cuenta del clima distendido que sobrevoló en el predio de la empresa Barbarella, en Pilar, en el marco del acto por el 130° aniversario de la fundación de la Unión Industrial Argentina. Allí, envalentonado tras las PASO y con un contexto distinto al del año pasado por el repunte de la actividad, Mauricio Macri instó a los ejecutivos a que “inviertan porque confían, no para hacerle un favor” al Gobierno; y les prometió “ir solucionado los problemas de competitividad” que hay en algunos sectores.

Las palabras del Presidente fueron en sintonía con el mensaje conciliador que, como anfitrión, pronunció el titular de la UIA Miguel Acevedo, quien celebró la presencia de Macri y aseguró que con el Gobierno los une “una agenda conjunta” de temas. ¿Cuáles? Ayer hubo varias coincidencias, que desde ambos sectores se encargaron de marcar. Por ejemplo, la necesidad de bajar la presión tributaria y de terminar con los altos niveles de litigiosidad laboral.

Sobre este último punto, Macri fue mucho más duro y prometió seguir luchando contra “las mafias de los juicios laborales”. “Basta de mentiras, basta de mentirles a los jueces sin tener ninguna consecuencia, ni querellantes ni querellados. No puede ser que uno pueda mentirle al juez y eso no tenga ningún tipo de consecuencia. Hay que prestigiar el sistema judicial: hay que generar respeto y ellos también se lo tienen que generar”, se quejó.

Y concluyó: “No podemos aflojar hasta que desaparezcan estas mafias, que alejan el crecimiento y el futuro de los argentinos”.

De buen humor, Macri le reclamó con picardía a Acevedo por la incomodidad del asiento que le dieron. “Quiero agradecerle más por haber elegido estos banquitos justo cuando tengo la operación de rodilla. No supe qué posición tomar durante todos los discursos, y encima la gobernadora (bonaerense) se entusiasmó”, dijo, con tono jocoso y dejando en evidencia que María Eugenia Vidal se había extendido más de lo previsto en su discurso. Fue, al cabo, una jornada con un clima muy distinto al que se vibró el año pasado, cuando el Gobierno, sin la presencia de Macri (estaba de gira oficial), pidió más inversiones y la UIA exigió medidas de estímulo.

Ayer, Macri no dejó pasar la oportunidad para aludir a las elecciones, justo después de que Cristina festejara su triunfo en la provincia de Buenos Aires, por un escueto 0,21% de diferencia sobre Cambiemos. “Me llena de entusiasmo saber que los argentinos elegimos una vez más el cambio”, afirmó en una frase con tinte electoral no sólo hacia la ex Presidenta, por lo que en el Gobierno consideran fue un amplio triunfo a nivel nacional y con un “empate” en terreno bonaerense; sino también a los industriales, que siguen con atención los vaivenes de la política a la hora de hacer inversiones. “Elegimos de corazón seguir profundizando el camino de la verdad, el camino del trabajo y el camino de la confianza”, agregó.

Luego, el mandatario se refirió a la reinserción a nivel internacional que impulsa su administración y resaltó que “algo maravilloso es que el mundo le haya abierto una oportunidad” a la Argentina. Pero, advirtió: “Depende de cada uno de nosotros aprovecharla, porque no es sólo una tarea de un Gobierno o de un Presidente, sino de todos”. Y apuntó que el eventual proceso de ingreso a la OCDE, sumado a la organización de la conferencia OMC -en diciembre- y la cumbre del G-20 del año próximo, “es clave para consolidar y demostrarle al mundo que el cambio en la Argentina va en serio”.

En el cierre de su alocución y tras recordar que, desde que asumió, su Gobierno propuso trabajo en conjunto con empresarios, trabajadores y gobiernos provinciales para analizar de cerca la cadena productiva y ver “dónde estaban las fallas”, Macri pidió respaldo a los industriales y prometió “ir solucionando los problemas de competitividad”. “Sabemos que falta, pero confíen, porque esto que empezamos juntos vino para quedarse. Estamos construyendo bases sólidas, los cimientos necesarios para lograr crecimiento y previsibilidad de largo plazo”, aseveró. “Vengo a decirles que inviertan porque confían, no para hacerme un favor a mí o a este Gobierno”, completó.

En esa línea, sostuvo que al principio “no fue fácil” pero que “los resultados ya se empiezan a sentir”. Y anticipó que las cifras que comunicará el INDEC en las próximas horas (ver más en página 15 ‘En julio, la industria creció...’) “van a estar en el orden de lo que ya otras mediciones han adelantado”.