Caso Madeleine McCann: nueva información sobre el principal sospechoso “electriza” a la policía

El caso de Madeleine McCann nunca deja de estar en el centro de atención de la prensa y la opinión pública mundial.

Tras los poco alentadores resultados que obtuvo el megaoperativo que se realizó a pedido de las autoridades alemanas a fines de mayo en Portugal, ahora se abre una nueva luz de esperanza para los investigadores.

Es que gracias a las declaraciones de un testigo, Christian Brueckner, el principal sospechoso en el caso de la desaparición de la pequeña usó un equipo especial de herramientas de robo para entrar al lugar en el que la niña de 3 años y sus hermanos se encontraban durmiendo.

La nueva información sobre Christian Brueckner que "electriza" a la policía

Según el testimonio de Helge B. -testigo clave en el caso de Madeleine McCann-, Christian Brueckner tenía un equipo especial para irrumpir en las casas, indicaron los policías que trabajan en el caso.

En este sentido, las autoridades creen que Christian Brueckner, que actualmente se encuentra en una prisión alemana, poseía un "kit para forzar cerraduras" que podía torcer los engranajes y abrir cualquier puerta de seguridad, publicó The Mirror.

Se dice que se jactó de tener estas herramientas, lo que podría desmantela la teoría de que el secuestrador de Madeleine trepó por una ventana antes de arrebatarla de su habitación en el complejo de Praia da Luz. 

Esta novedosa información asombró a la policía y los fiscales alemanes que, aseguran, se encuentran "electrizados" por el descubrimiento. 

Otra línea de investigación en la que trabajan, indica el medio, es si el sospechoso empleó solvente para pintura de autos (una sustancia química que había en el taller mecánico en el que trabajaba) para sedar a Maddie y sacarla del cuarto si que hiciera ruido.

En una entrevista exclusiva que dio desde un lugar secreto, Helge B, que es testigo protegido de la policía alemana, le dijo a la cineasta Jutta Rabe en  exclusiva para el diario The Sun: "Entró por la puerta".

Los fiscales alemanes esperan usar la evidencia de las ganzúas para atrapar a Brueckner, quien está en la cárcel por delitos de drogas y apelando una sentencia de siete años por violar a una mujer de 72 años.

Helge B., que tiene 52 años, conoció a su compatriota un año antes de que Maddie desapareciera, y confirmó que encontró el kit de cerrajería en la casa de Brueckner, en el Algarve.

El hombre, que también es un criminal, se había unido a otro amigo, Manfred Seyferth, y decidió saquear la casa. “Sabía por Christian que usaba herramientas para irrumpir en complejos turísticos, hoteles y casas de vacaciones para robar a los turistas", afirmó.

Y agregó: “Había pasaportes sobre la mesa. Había todo tipo de cosas por ahí: cámaras, maletas, todo lo que los turistas tienen consigo. También encontré un juego de ganzúas".

Helge B., que se quedó con el kit y se lo contó a la policía alemana, destacó: "Se puede usar para forzar cualquier cerradura, incluidas las de seguridad".

Probablemente pensando que podría usarlo para sus propios delitos menores, indicó el medio, Helge B retuvo el juego de herramientas para abrir cerraduras. 

Los hombres se conocieron y se hicieron amigos en Portugal, antes de que Helge B. afirmara que se sintió asqueado por las imágenes de video que encontró de Brueckner que lo mostraban violando a una jubilada estadounidense y a una adolescente.

El testigo dijo que robó cintas de video y un arma de fuego de la casa de Brueckner antes de que Madeleine desapareciera. 

De acuerdo a su relato, le dijo a Brueckner: "'¡Esto roza la violación!'. A lo que el otro sólo respondió: 'Cállate'. Fue entonces cuando supe qué tipo de persona era Brueckner”.

Finalmente, el hombre declaró  que volvió a encontrarse con Brueckner en un festival de música en España, en 2008, donde discutieron el caso de Madeleine McCann y el sospechoso supuestamente le dijo que "ella no gritó".

Quién es Christian Brueckner, el principal sospechoso

Christian Brueckner (46), un abusador de niños y traficante de drogas convicto, está tras las rejas en Alemania por haber violado a una mujer de 72 años en la misma zona de la región del Algarve donde desapareció Madeleine McCann. Y en esa misma época.

La policía alemana indicó en junio de 2020 que creían que Madeleine estaba muerta y que era probable que Brueckner fuera el responsable. Ocurre que vivía en esa zona del sur de Portugal en 2007.

El sospechoso ha defendido su inocencia desde que surgieron las primeras acusaciones e, incluso, escribió varias cartas condenando a la policía y a otras personas involucradas en la investigación.

La historia de un caso emblemático

Madeleine McCann desapareció poco antes de cumplir cuatro años, el 3 de mayo de 2007, en Praia da Luz, en el sur de Portugal, donde pasaba las vacaciones con su familia.

Esa noche, la niña dormía en la habitación del complejo turístico junto a sus hermanos, los gemelos Sean y Amelie, de 2 años.

Sus padres, Kate y Gerry McCann, cenaban con amigos en "Tapas", el restaurante del centro vacacional, a unos 50 metros de la habitación. Habían llegado allí a eso de las 20:40 y cada 20 minutos se turnaban para ir a vigilarlos y comprobar que todo estuviera bien.

Alrededor de las 22, tras una de esas visitas, la mamá de la pequeña regresó llorando y gritando a la mesa. "Se la llevaron", repetía una y otra vez.

Su desaparición generó una excepcional campaña. Las fotos de la niña de ojos claros con una característica mancha en el iris, dieron la vuelta al mundo y, durante meses, ocuparon portadas de periódicos y horas de televisión.

La investigación estuvo estancada por años antes de que las autoridades se fijaran en el alemán Christian Brueckner, un hombre que vivía en esa época a unos kilómetros del hotel.

"La investigación sobre el sospechoso de 46 años de Brunswick continuará probablemente durante mucho tiempo", advirtió la fiscalía.