Commander, el pastor alemán del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, volvió al centro de la escena por haber mordido, una vez más, a un agente del Servicio Secreto.
El hecho ocurrió este lunes, cerca de las 20, hora del este norteamericano, informó el portavoz de la agencia de seguridad, Anthony Guglielmi.
El hombre "fue tratado por personal médico y se encuentra bien", informaron desde la seguridad presidencial, aunque la preocupación por el comportamiento del perro de dos años preocupa por sus reiterados capítulos violentos.
La cadena CNN contabilizó otros diez antecedentes entre octubre de 2022 y enero de 2023. Uno de los más resonantes, por la gravedad de las heridas ocasionadas, fue el 3 de noviembre, cuando el agente mordido en brazos y piernas debió ser hospitalizado.
Desde la Casa Blanca se indicó en julio que los Biden estaban contemplando someterlo a un nuevo entrenamiento para controlar la situación, pero aún no existió confirmación oficial sobre esta medida.
Commander llegó a la Casa Blanca en diciembre de 2021, como un regalo que recibió el presidente de parte de su familia.
Commander se sumó a los Biden luego de la muerte de Champ, otro pastor alemán que acompañó al ex vicepresidente de Barack Obama durante 13 años.
Commander, el perro presidencial, ya suma 11 ataques dentro de la Casa Blanca. Foto APSi bien los perros en la Casa Blanca tienen una larga tradición, ningún otro mandatario había tenido tantos inconvenientes con el comportamiento de sus mascotas.
En julio de 2023, Guglielmi contó que ha estado "buscando la manera de manejar a las mascotas familiares y este incidente no es la excepción". "Nos tomamos muy en serio la salud y el bienestar de nuestros empleados”, afirmó.
Por aquellos días, Elizabeth Alexander, directora de comunicaciones para la primera dama, Jill Biden, había manifestado que el complejo presidencial es “un ambiente único y a menudo estresante” para mascotas y que la familia “está buscando maneras de mejorar esta situación para todos”.
La llegada de Commander a la Casa Blanca, el perro que atacó 11 veces a agentes de seguridad
Biden le había dado la bienvenida a Commander a través de las redes sociales en diciembre de 2021. La llegada del "Comandante" intentaba cambiar la imagen que habían dejado sus antecesores, Champ y Major, de la misma raza.
Major, de 3 años, terminó siendo castigado tras un par de incidentes de mordeduras en los meses posteriores a su llegada. Fue enviado a Delaware para ser entrenado antes de volver a la Casa Blanca.
Los funcionarios de la Casa Blanca habían dicho que el comportamiento agresivo de Major se debía a que aún se estaba acostumbrando a su entorno.
Tiempo después volvió a la casa de gobierno, pero fue retirado de nuevo por otros incidentes. Aquella vez, de manera definitiva.
Por su parte, Willow, una gata de 3 años que llegó a la familia Biden en 2022, se mantiene lejos de los problemas y hasta duerme sobre la cabeza del presidente algunas noches, reveló el mismo mandatario en julio de 2023.
Con información de agencias
DB
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