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      Multitudinaria marcha a favor de la independencia de Cataluña

      Cientos de miles de personas colmaron el centro de Barcelona, en apoyo a la iniciativa del gobierno regional.

      Multitudinaria marcha a favor de la independencia de CataluñaCLAIMA20150911_0361 REUTERS Masiva. La marcha de este viernes en la avenida Meridiana, de Barcelona. / REUTERS

      En el Día Nacional de Cataluña, la Diada, los independentistas se lanzaron este viernes a las calles de Barcelona en una enorme manifestación popular en apoyo a la proclamación de una República catalana y la ruptura con España.
      Fue una concentración muy colorida, familiar y pacífica de centenares de miles de personas, sobre todo jóvenes, que hicieron gala de un gran entusiasmo nacionalista. La policía local estimó en 1.400.000 personas el tamaño de la multitud que se desplegó por la avenida Meridiana, lo cual fue inmediatamente cuestionado por otros sectores opuestos a la secesión que estimaron como “desmesurada” esa cifra. El gobierno nacional la rebajó a 520.000.
      Sin entrar en la inevitable guerra de números, lo cierto es que a simple vista aérea se pudo apreciar una extraordinaria cantidad de ciudadanos, lo que sin duda va a tener consecuencias en las elecciones del próximo 27 de septiembre.
      Los comicios son de carácter regional para elegir el nuevo Parlamento de Cataluña con un mandato de cuatro años para elegir a un nuevo Ejecutivo que reemplace a Artur Mas, el presidente de la Generalitat y líder de la coalición secesionista Juntos Por el Sí.
      Pero Mas ha continuado en su ofensiva independentista y otorga al resultado de las urnas una indicación positiva, si es reelegido, para poner en marcha un proceso constituyente que culmine con una declaración unilateral de independencia. Estos objetivos estuvieron presentes en el diseño de la gigantesca marcha, y en los carteles y consignas de la multitud.
      “Tenemos ante nosotros lo que ninguna generación había soñado”, ha subrayado Quim Torra, presidente de la organización Omnium Cultural, responsable de preparación de la Diada. Y remarcó la oportunidad histórica que se abre ante las aspiraciones independentistas porque, a su juicio, “lo que es normal es querer tener un Estado propio, y lo que es extraño es vivir en un Estado impropio”.
      Jordi Sanchez, de la Asamblea Nacional Catalana, ANC, señaló: “Ya no queremos formar parte del reino de España; hemos decidido que queremos irnos y lo haremos con la legitimidad de las urnas”. Interrumpido con gritos de independencia, Sánchez subrayó que “este nuevo país lo construiremos entre todos”.
      La ANC y Omnium son las dos grandes entidades de movilización popular integradas en Juntos Por el Sí junto a Convergencia Democrática y Esquerra Republicana además de prestigiosas figuras independientes.
      El gran escenario de la Diada fue la avenida Meridiana, dividida en 135 tramos –tantos como escaños en el Parlamento– que sirven simbólicamente para trasladar a la cámara los diez ejes de la República catalana: regeneración democrática, bienestar y justicia social, diversidad, solidaridad, igualdad, sostenibilidad, equilibrio territorial, educación y cultura, innovación y una Cataluña abierta al mundo.
      Los tres principales dirigentes de Juntos por el Sí conversaron con una cincuentena de medios internacionales. El tema que concentró la mayoría de las preguntas fue la división entre el voto para elegir diputados al Parlamento y un plebiscito hipotético. La diferencia es relevante porque la mayoría en el Parlamento es de 68 diputados, que se designan con un 44% de los votos. El plebiscito, que no está formalmente planteado pero es fundamental para dar legitimidad a la declaración de secesión, se gana con más del 50% de los sufragios.
      El problema es que tres sondeos coincidieron estos últimos días en que el partido de Artur Mas no alcanzaría la mayoría absoluta porque reuniría menos de 68 diputados, con un porcentaje de votos en torno al 39%. Estas cifras son una derrota para Juntos por el Sí que esperaba imponerse por mayoría absoluta. Sus esperanzas ahora son una alianza con Unidad Popular (muy a la izquierda) que no es partidario de apoyar una reelección de Mas y considera que si el apoyo al nuevo gobierno no llega al 50% de los votos carecerá de autoridad moral para poner en marcha un proceso de independencia.


      Sobre la firma

      Juan Carlos Algañaraz

      Corresponsal en Madrid jcalganaraz@clarin.com

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