Escándalo en Uruguay: el Senado expulsó al legislador imputado por abuso sexual de menores

El Senado de Uruguay expulsó este miércoles al legislador oficialista Gustavo Penadés, imputado por delitos de abuso sexual de menores. La remoción se dispuso por unanimidad y apartará de forma definitiva al exsenador, que en junio había adelantado su renuncia de la cámara.

Penadés (58), integrante del Partido Nacional y que en marzo había recibido apoyo de Luis Lacalle Pou y ministros uruguayos, está señalado por la Justicia por la comisión de 22 delitos de explotación sexual a menores de edad. El martes quedó imputado en calidad de autor y en reiteración real, por múltiples delitos sexuales, en su mayoría de retribución a la explotación sexual de menores de edad.

Horas más tarde, el Senado aprobó con 29 votos de 29 posibles su expulsión del cuerpo.

La moción había sido presentada por el opositor Frente Amplio (FA). Luego, las bancadas de todos los partidos políticos con representación llegaron a un acuerdo conjunto de aplicar la Constitución para removerlo.

"Los coordinadores de todos los partidos políticos realizamos una reunión con un objeto de común acuerdo, proponer la aplicación del artículo 115 de la Constitución de la República, que lo llevamos a su máximo extremo de remoción del hasta hoy senador suspendido Gustavo Penadés", indicó la coordinadora de bancada del PN, Graciela Bianchi.

La moción se basó en el motivo que explican "las últimas palabras" del artículo constitucional, que refiere a la explusión "por actos de conducta que le hicieren indigno de su cargo".

La decisión resultó clave para su salida de la cámara. Es que, si bien el ahora exsenador renunció en junio a "todas las responsabilidades" que tenía como dirigente del oficialista Partido Nacional (PN) y había sido despojado de sus fueros parlamentarios, aún formaba parte del cuerpo, cuyas bancas son a título personal.

Los discursos de los senadores que votaron la expulsión de Penadés

Para fundamentar sus votos, los legisladores emitieron discursos en los que expresaron su condena a los delitos por los cuales fue imputado Penadés.

En concreto, el senador por el Frente Amplio José Carlos Mahía señaló que "hubo abuso de menores, violación y toda una serie de delitos gravísimos como no tiene precedente el Senado de la República" y llamó a "reflexionar" sobre lo importante de la separación de poderes y "que no se utilicen poderes del Estado para defender a nadie".

Bianchi dijo que se trata de una situación que "impacta a todos" por "hechos deleznables y execrables" y acotó que, si bien el exsenador "tiene todavía la presunción de inocencia hasta la condena", el Senado no necesitaba esperar la resolución judicial para actuar.

La vicepresidenta, Beatriz Argimón, en tanto, bajó del estrado de la presidencia del Senado para emitir una fundamentación desde su bancada en la que remarcó la importancia de la "señal" que el Senado dio al país de que "nadie es más que nadie".

Argimón dijo que "no es fácil pasar el peligro que una víctima tiene que pasar recordando las aberraciones de las cuales fue víctima" y aún así animarse a denunciar.

"Están todas las garantías de la institucionalidad de este país para hacer la denuncia y que se le crea, por eso esto no tiene que ver solamente con la decisión que estamos tomando con dignidad desde el Senado, tiene que ver con un mensaje a la sociedad uruguaya toda", concluyó.

Las graves imputaciones de Penadés en Uruguay

El escándalo estalló en marzo pasado, cuando una militante trans del oficialista Partido Nacional acusó al senador Gustavo Penadés de pedofilia y abuso sexual.

El entonces integrante del partido oficilialista respondió con una conferencia de prensa en la que negó los hechos y afirmó que llevaría a la Justicia a la mujer que lo denunció.

Las declaraciones de Romina Celeste Papasso fueron gravísimas. Aseguró haber mantenido relaciones sexuales dos veces con Penadés cuando tenía 13 años y aún no había iniciado su transición. Además, remarcó que el senador le dio dinero como "regalo" tras el acto.

"Nunca he engañado ni he renegado sobre mi orientación sexual, pero lo que no admito es que por tenerla alguien me pueda acusar de pedófilo", contestó él horas más tarde.

Penadés recibió el veloz respaldo del presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou. "Le creo a él", dijo el mandatario.

También lo apoyó el ministro del Interior, Luis Alberto Heber. "La declaración de Penadés fue más que aclaratoria de la situación que estamos viviendo. Y estamos con mucha indignación con este enchastre pero no tenemos otra forma de digerir esto que no sea en la Justicia", dijo Heber tras reunirse con el senador.

Con información de EFE

DB