Movimientos de armas disparan los temores bélicos en los Balcanes

Los Balcanes no terminan de cerrar sus heridas. Una semana después de que la Unión Europea les entreabriera la puerta para que a partir de 2025 los países de la región vayan ingresando al bloque, los miedos a una nueva espiral de violencia vuelven a crecer con la República Serbia de Bosnia como punto de máxima fricción.

Milorad Dodik, líder de la parte bosnia de mayoría serbia (una de las dos que conforman Bosnia-Herzegovina), confirmó la compra de 2.500 fusiles de asalto automáticos, en teoría destinados a reforzar su policía contra amenazas terroristas.

Pero en la región, en la capital Sarajevo y en Bruselas, nadie ve esa compra necesaria y temen que Dodik, que se enfrenta a las urnas en octubre y amenaza con independizar su región del resto de Bosnia, trate de intimidar a la oposición política y al final buscar la secesión para intentar unirse a Serbia.

Esas armas, y el decidido apoyo de Moscú que busca impedir que Bosnia-Herzegovina ingrese en la OTAN, le servirían para forzar esa independencia por la fuerza, provocando un nuevo conflicto. El gobierno de Dodik espera recibir las armas a principios de marzo, semanas antes de que se inaugure en su región un centro de entrenamiento financiado por Moscú y que tendrá asesores rusos.

Según los medios de la región, Dodik tiene el apoyo de los “Lobos de la Noche”. Parecen casi unos personajes carnavalescos pero son una unidad paramilitar rusa con estrechos contactos con el Kremlin y que ya tuvieron un papel militar en el conflicto ucraniano.

Dodik dijo que las armas son para “luchar contra el terrorismo” y que tiene toda la legitimidad para armar a su Policía. Pero el armamento es casi militar y el alto representante de la comunidad internacional en Bosnia, donde todavía hay fuerzas de paz internacionales, Valentin Inzko, declaró que “una policía normal no necesita esas armas” y recordó que en su país (Austria) la policía sólo tiene 400 de esos fusiles de asalto automáticos para todo el país.

Inzko teme una carrera de armamentos en la región: “me gustaría ver el país con la menor cantidad de armas posible. Si una parte tiene este tipo de armas la otra parte también querrá tenerlas”.

La estructura de la actual Bosnia-Herzegovina fue una creación de los acuerdos de paz de Dayton de hace 22 años que puso sobre el mapa lo que ya era una realidad sobre el terreno. Lo serbios controlaban casi la mitad de Bosnia. Para no partir el país, se crearon dos entidades políticas: la Federación Musulmano-Croata y la República Serbia de Bosnia o República Srpska.

Desde entonces el país es uno de los más inestables de Europa, de los más corruptos y de los más pobres, con el récord mundial de desempleo juvenil.