Noticias hoy
    En vivo

      Pequeñas grandes historias de gente común

      Una impresionante y conmovedora cadena de solidaridad se puso en marcha para dar albergue, comida, cuidados y contención a esos huéspedes inesperados, ignorantes aún de lo que había ocurrido.

      Pequeñas grandes historias de gente comúnAeropuerto de Gander, Canadá, 11 de septiembre de 2001.

      Detrás de las grandes tragedias suelen ocultarse pequeñas historias que no siempre salen a la luz. Héroes anónimos, seres que apenas estaban en el lugar correcto y en el momento indicado, y que se convirtieron de golpe en protagonistas impensados de acontecimientos que marcarían sus vidas para siempre.

      Algo de eso les ocurrió a los habitantes de Gander aquella mañana del 11 de septiembre de 2001. Localidad remota del noreste de Canadá, en la isla de Newfoundland, a 1.500 kilómetros de Ottawa, el día fatídico del ataque a las Torres Gemelas en Nueva York vio alterada su calma y sus rutinas antes de que pudieran darse cuenta qué había ocurrido realmente.

      Su aeropuerto, acostumbrado a recibir un promedio de siete vuelos diarios, se vio desbordado con los 38, provenientes de distintas partes del mundo, que debieron aterrizar en su pista cuando el espacio aéreo estadounidense fue cerrado por decisión de las autoridades ante el temor de más atentados.

      En apenas cuatro horas, la población pasó de las 9 mil almas de aquel entonces a más de 14.800, con los pasajeros que desembarcaron en su suelo, ignorantes todavía de las razones detrás de ese desvío insospechado. De inmediato, el pueblo entero se movilizó.

      Una impresionante y conmovedora cadena de solidaridad se puso en marcha para dar albergue, comida, cuidados y contención a esos huéspedes inesperados, ignorantes aún de lo que había ocurrido. Las 500 camas de hotelería disponibles se convirtieron en miles, improvisando lugares en la escuela, el ayuntamiento, las iglesias, las oficinas, o poniendo a disposición las propias casas para alojar a los viajeros.

      Hombres y mujeres se ofrecieron para cocinar, cuidar de las mascotas que bajaron de los aviones y prestar teléfonos de línea para llevar y traer noticias: los celulares eran un bien escaso por entonces. Los viajeros debieron permanecer en Gander por más de dos días.

      Fueron suficientes para tejer vínculos que perduraron con el tiempo, y no olvidan ni unos ni otros. En la cartelera porteña, un musical, “Come from away”, homenajea esa gesta.


      Sobre la firma

      Silvia Fesquet
      Silvia Fesquet

      Periodista. Editora Jefa de Redacción y Editora Jefa del Area de Revistas de Clarín. Fue Jefa de Redacción de Revista La Semana, Vicedirectora de Revista Luna y Vicedirectora de Revista Noticias. Premio “Mujer que hace la diferencia”, de International Women's Forum. Preside IWF Argentina. Integra el Consejo Editorial de WINN (Women in the News Netwok) y Asociación Marianne. Jurado de los premios ADEPA. Red de Mujeres Líderes en Negocios (Univ. De San Andrés). sfesquet@clarin.com

      Bio completa