Los secretos que solo le contarías a una máquina de escribir

De la taquillera Tienes un e-mail, comedia romántica emblema de fines de los años 90, a You, la serie original de Netflix, las librerías son probadamente atractivas para las pantallas. Michael y Hilary Gustafson, los dueños de Literati, un reducto independiente en Ann Arbor, Michigan, acaban de publicar Notes From a Public Typewriter, un libro que prueba lo inspiradoras que pueden ser también para las confidencias de los lectores.

Michael se reconoce fascinado por las máquinas de escribir desde que se enamoró de la Smith Corona de su abuelo, un orgulloso artefacto de la década de 1930, que luego heredó. Así que cuando él y su mujer decidieron dejar sus trabajos en Nueva York y fundar su propia librería en 2013, usaron esa imagen como logo del negocio.

A modo de experimento, además, instalaron en el subsuelo, entre los libros de jardinería, viajes y cocina, una Olivetti Lettera 32 con una hoja en blanco que invitaba a los visitantes a escribir lo que quisieran en forma anónima. Y funcionó.

Poemas, chistes, reflexiones, recuerdos, gente que se despedía de sus mascotas que acababan de morir ("Querido Max, eras un buen gato viejo. Lamento haberte empujado del sofá a veces cuando querías sentarte en mi regazo...") o que compartía emociones tan íntimas como el miedo de un alcohólico ante el segundo día sin beber comenzaron a llenar las páginas.

"La vida, como esta máquina, no tiene botón de retroceso. Tipea con fuerza y no mires atrás"; "querida Nana, te hubiera encantado este lugar..." y "las faltas de ortografía son un singo de genio" son algunas de las ocurrencias que integran el libro que los Gustafson presentan por estos días en los Estados Unidos.

No faltan las cosas que solo confesarías a una máquina de escribir: "Pasé 22 años diciéndole a ella que hiciera grandes cosas. Ahora que ha ido a hacerlas estoy triste."

"Ha sido una suerte de diario maravilloso de una ciudad, escribiéndose en una librería", definen los Gustafson, con la misma convicción con la cual los lectores disfrutamos que nos recomienden un buen título. Del suyo, ha dicho The Guardian que es una celebración "deliciosamente extravagante y conmovedora" de un tiempo analógico de "tinta, papel y teclas mecánicas".

Literati, nombre que refiere a personas educadas e interesadas en la literatura, acaba de ser elegida por Publishers Weekly , un sitio internacional sobre el negocio editorial, como la Librería del Año 2019.