La necesidad del oficialismo de reagruparse en torno a la candidatura de Sergio Massa viene silenciando las internas que prácticamente lo acompañaron desde el inicio de la gestión, amen de las repercusiones que han tenido los escándalos devenidos de la febril actividad bancaria de "Chocolate" Rigau y de la glamorosa travesía por el Mediterráneo de Martín Insaurralde.
Pero la baja ejecución del presupuesto del plan Procrear, apenas un 42% en lo que va del año, produjo un fuerte conflicto interno en el Ministerio de Vivienda y Hábitat que terminó con una "confusa" renuncia.
El programa de aliento a la vivienda y a construcción en lotes, que fue una marca del kirchnerismo, ha venido sintiendo, además, el impacto de una alta inflación que dispara los valores de la construcción y genera perjuicios en miles de beneficiarios que consideran insuficientes los fondos girados desde la Nación.
Los cruces registrados puertas adentro de la cartera, al parecer, surgieron cuando desde la Secretaría de Desarrollo Territorial reclamaron una actualización de esos montos.
Si bien adujeron "motivos personales", el secretario que tiene a cargo el Procrear, Luciano Scatolini, renunció el pasado 20 de septiembre a su cargo en medio de esas disputas.
En un principio había trascendido que su salida se debía a una presión del massismo, molesto por declaraciones que había dado a principios de ese mes en el que admitía la "preocupación" por los reclamos de los beneficiarios y deslizaba que "Economía estaba buscando cómo generar los fondos necesarios”. Sin embargo, en el entorno del ministro-candidato rechazaron esa versión.
Al parecer, en su decisión habrían influido ciertamente tanto la necesidad de abocarse a "temas familiares" como sus diferencias con la conducción del ministerio que ejerce el ex intendente Santiago Maggiotti (Navarro).
Según el portal de datos abiertos del Programa de acceso a la vivienda, al 1° de octubre pasado el mismo llevaba ejecutado un 42% de su presupuesto que, en 2023, tenía previsto un fondo anual cercano a los $183 mil millones. Es decir, a dos meses de finalizar el año, el citado plan no había alcanzado ni la mitad de la inversión prevista.
Luciano Scatolini renunció a su cargo en la secretaría que administraba el Procrear.En las últimas dos semanas, con todo, se registró en la cartera una suerte de comedia de enredos porque la renuncia de Scatolini, dirigida al presidente Alberto Fernández y a su superior en el cargo, aún no le fue aceptada.
Funcionario "ausentado" y el ministro en Suiza
La llamativa situación llevó a que durante los últimos días aparecieran resoluciones ministeriales firmadas por otros funcionarios por hallarse el saliente secretario "ausentado".
En medio de la caza de brujas que disparó en la clase política el "escándalo Insaurralde" y sus viajes de lujo en el yate "Bandido", desde un sector del propio gobierno se hizo trascender que el ministro Maggiotti se encontraba el pasado miércoles en Ginebra.
Desde la vocería del funcionario aclararon que sí estuvo ese día en la capital Suiza y al día siguiente en París, en el marco de actividades vinculadas a su condición de titular del MINURVI (un Foro que reúne a autoridades de la Vivienda y el Urbanismo de Latinoamérica).
Maggiotti asumió en noviembre el Ministerio, en reemplazo de Ferraresi.Los viajes al exterior de los funcionarios ganaron la agenda pública debido al malestar social que generaron las vacaciones del dúo Insaurralde-Clerici, una ostentación de riqueza en medio del preocupante crecimiento de la pobreza.
El último viaje de Alberto
La semana próxima Alberto Fernández encabezará una gira por China con el objetivo de acelerar la liberación de otro tramo del "swap" de monedas con el Banco Popular del gigante asiático. En el entorno presidencial aseguran que podría ser "el último viaje oficial" del jefe de Estado al tiempo que defienden los gastos que demandó la puesta a punto de la flota aérea oficial.
La urgencia de la campaña y la necesidad del oficialismo de instalar que el balotaje del 19 de noviembre es una suerte de destino manifiesto, como se dijo, insonorizan cualquier interna.
Pero no son pocos los dirigentes que alertan sobre las grietas que podrían emerger en caso de un resultado electoral adverso. "Si se pierde, va a haber pases de factura, búsqueda de culpables y todo se va atomizar en el peronismo", analizó un jefe sindical consultado por este diario.
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