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      Tiene 15 años y un policía se queda con ella todo el día en la escuela porque su exnovio la amenaza

      El efectivo permanece junto al aula donde toma clases. Y en el recreo cuida la puerta del colegio.

      Redacción Clarín

      Tiene 15 años. Va a la escuela con un policía, que la espera en la puerta. Termina su jornada de estudio y vuelve a su casa, acompañada por el mismo efectivo. Vaya donde vaya, el hombre se convirtió en su sombra. Es que necesita custodia policial permanente, las 24 horas, por las amenazas que recibe de su exnovio, también menor de edad.

      La chica vive en Caucete, una pequeña ciudad ubicada en el sur de la provincia de San Juan. Está cursando el cuarto año de la Escuela de Comercio Alfonsina Storni. Desde la semana pasada, asiste con su vigilancia permanente, algo que sorprendió a todos en ese colegio.


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      Directivos de la institución confirmaron el caso a Clarín, aunque señalaron que, por tratarse de una menor de edad, no están habilitados para dar mayores precisiones.

      El policía que acompaña a la chica pertenece a la Comisaría 9ª de Caucete. "Ha venido un oficio del Juzgado de Menores, ellos están manejando todo. Nosotros hemos cumplido con el oficio, que dice que tiene que tener custodia las 24 horas", explicaron a Clarín desde la comisaría, afirmando que el efectivo acompaña a la chica a la escuela y a su casa, todo el día.

      Según lo publicado en el diario Tiempo de San Juan, la chica hizo una denuncia porque su exnovio —que también es menor de edad— la maltrataba, la golpeaba, la perseguía, y hasta amenazaba de muerte. Tiene miedo porque no sabe lo que el muchacho pueda llegar a hacerle.

      Inicialmente, el Juzgado de Niñez y Adolescencia impuso un cerco perimetral al joven. Pero él no lo respetó. Entonces, se ordenó la custodia policial por 24 horas para proteger a la adolescente.


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      En la escuela contaron al medio sanjuanino que "es angustiante" ver al policía la puerta del aula. “Cuando estamos en clases, el policía se pone al lado del curso donde está ella, pero cuando es recreo se va hacia la única puerta de ingreso por las dudas que (el ex) quiera ingresar. Y hacen todo eso porque nosotros sabemos que el chico anda rondando la escuela”, precisaron.

      Como es menor de edad, al joven no pueden detenerlo. Una alta fuente policial informó al diario local que la vigilancia “será por un tiempo hasta que al chico se lo pueda internar en algún lugar, ya que tiene un grave problema de adicción a las drogas y todavía están buscando un hogar para internarlo".