Los cumples saludables tienen sus golosanas

De algunas piñatas ya no salen caramelos: salen barritas de cereal.

Los cumpleaños infantiles se han convertido en verdaderos despliegues de comida “saludable”: muffins de vegetales en lugar de snacks, pinchos de frutas en lugar de alfajores de chocolate, bebidas naturales en lugar de gaseosas. La tendencia, dicen los especialistas, crece día a día. ¿Se acerca el fin de la era del chizito?

“Lo más importante es que la comida sea casera, sin conservantes, químicos ni aditivos. Y si hay chicos que sufren de celiaquía, sin gluten”, explica Giselle Riedel, que lleva adelante la empresa Delibox junto a su socia Carolina Palacios.

“Como saladitos podemos servir scons de queso o nuggets de pollo. ¿Dulces? Hay de todo. Las que salen mucho son las cookies con azúcar mascabo”, agrega Giselle, que tiene una hija, Mía, de tres años, a quien le inculca los beneficios de la alimentación sana. “Trato de que coma lo mejor posible. Si me pide una medialuna, por ejemplo, le ofrezco un puñado de frutos secos”, aporta.

A la hora de armar un presupuesto, los precios varían. “Los cumpleaños tradicionales son más baratos que los saludables”, sigue Giselle. “Un kilo de azúcar común, por ejemplo, vale unos 15 pesos. Y un kilo de azúcar mascabo o integral, 50. El que pueda invertir en cumple saludable, que lo haga. Vale la pena”.

-¿Y cómo preparan las tortas? ¿Sin dulce de leche?

-Hay madres que para que los cumples de sus hijos nos piden dos tortas: una saludable y una clásica de dulce de leche. En esos festejos, los chicos profundizan los vínculos con sus amigos. Y creemos que comer dulce de leche así, en ese contexto, y cada tanto, también es muy saludable. El problema es si a los chicos les das de comer dulce de leche todos los días.

Actriz, Romina Polnoroff vivió durante diez años en Nueva York. Allí, según ella misma explica, empezó a incorporar algunos secretos de la cocina “clean”, algo que le sirvió para prepararles comida de esas características -“limpia”, para ser rigurosos con la traducción- a sus hijos, Joaquín, de 9 años, y Esmeralda, de cinco. “Cocinaba, subía a las redes sociales imágenes de los platos que preparaba y mis amigas me pedían las recetas. Cuando le festejé a Esmeralda su cuarto cumpleaños, fue un éxito total. Entonces decidí dedicarme a esto de manera profesional”, describe Romina.

Así, entre ingredientes orgánicos, nació la cuenta @mamasanablog, que ya tiene 60.000 seguidores. Además de organizar eventos, Romina da charlas, dicta talleres, filma videos. “A los chicos les atrae todo lo que sea colorido. Y si es saludable, lo comen con muchas ganas. Les puedo preparar muffins de harina integral, sandías en triangulitos, tomates cherry... Las que también se entusiasman con esos platos son las madres que acompañan a sus hijos a los eventos”, aporta Romina.

-¿Cuáles son las bebidas más saludables?

-A los chicos hay que darles agua, soda, aguas saborizadas o jugos naturales.

-¿Nunca una gaseosa?

-Sí, claro que pueden tomar gaseosas. Si van a un cumple, mis hijos lo hacen. No son extraterrestres. Pero es de vez en cuando. En mi casa no hay nada prohibido. Es más, como hobby, mi marido Máximo también tiene su cuenta de Instagram, que se llama... @papachoripan. Y ahí sube fotos de asados, de hamburguesas...

Con una historia similar a la de Romina, Cecilia Duca también tiene muchos seguidores en las redes sociales. En Cómo come León, un sitio que armó cuando vio con qué voracidad se alimentaba su segundo hijo, transmite sus recetas saludables. “Lo primero que descarté de los cumpleaños para chicos fueron los panchitos. Como es un diminutivo, parecen más benévolos. Pero no. Encima, en los cumples se sirven fríos. Y quedan tirados por ahí, a medio comer. Los reemplacé por bombitas de papa y queso, mucho más ricas”, explica Cecilia.

Fascinada con la gran cantidad de “harinas nuevas”, una de las especialidades de Cecilia es el “Mantecol casero”. “Lo que también les gusta mucho a los chicos es el pochoclo saludable”, aclara. “Se lo comen todo”.

-¿En qué lugar han quedado las papas fritas?

-Yo recomiendo servir un platito de snacks, pero no cinco platitos. Que haya papas fritas está bien, pero no papas fritas, chizitos, palitos... Al ver las papas fritas, los chicos entran en confianza con lo que están comiendo y, entonces, se pueden volcar a lo saludable.

Irene Menchero es madrileña y vive hace tres años en Buenos Aires. Asesora en nutrición y dietética, está al frente de Comiendo consciente, otra compañía de alimentos saludables. “Seguimos la filosofía slow food, que entre otras cuestiones consiste en priorizar los alimentos autóctonos, libres de tóxicos, estacionales”, comenta. “A los chicos les encantan las frutas. Por eso, siempre con alguna temática, nosotros les armamos figuras... Con una sandía podemos hacer un barco pirata... Para evitar los colorantes, si queremos agregar algún dibujo usamos papel. Y se lo clavamos con un palito a cada fruta. Hace poco hicimos frutas con alitas de dragón. ¡Lindísimas!”.

De “primera calidad”, el “servicio” que ofrece Irene cuesta, “como piso”, 350 pesos por cada chico. Como parte de la misma “filosofía”, Irene señala que los souvenirs que se les regalan a los invitados al final de los cumpleaños “tienen que estar en sintonía” con lo que se come. “Así como nos interesa la comida saludable, tenemos muy en cuenta el cuidado del medio ambiente. Como souvenir, por ejemplo, podemos armar cajitas con un poco de tierra y semillas, para que los chicos las planten cuando lleguen a sus casas”.

Producción: Daniela Gutiérrez

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Receta para una torta saludable

Cecilia Duca, de Cómo come León, nos dio la receta para hacer una torta saludable: “Primero se prepara el bizcochuelo. Ingredientes: tres huevos, una taza y media de azúcar, media taza de aceite vegetal, una taza de jugo de naranja natural, agua, o leche, tres tazas de harina integral fina, media taza de cacao en polvo y una cucharada de polvo de hornear. Con bowl y batidora, batir ligeramente los huevos junto con el azúcar integral y la media taza de aceite vegetal. Agregar dos tazas de harina integral, alternar con una taza del líquido elegido y luego la otra taza de harina. Integrar todo con la batidora. Agregar el polvo de hornear. Agregar a gusto unas gotas de extracto de vainilla o ralladura de naranja si se usó su jugo. Por último, volcar todo al molde, sin olvidar de engrasarlo y enharinarlo. En 35 minutos, aproximadamente a 180 grados, estará listo. Tips: precalentar el horno 20 minutos antes de usar, agregar el polvo de hornear a último momento, también se puede reemplazar el líquido por yogur bebible o leches veggies, se puede usar azúcar mascabo, pero en ese caso se reduce a una taza, esperar que se enfríe para cortar en capas. Relleno: queso crema. Primero se humedece cada capa de torta con un almíbar muy simple. Se colocan en una ollita partes iguales de azúcar y agua y se cocina a fuego mínimo hasta que se espesa. Hay que dejarlo enfriar antes de colocarlo en la torta. Y luego con una cuchara se va humedeciendo cada disco. Se puede tener el almíbar en la heladera, dura meses. Durante la cocción se le puede poner unas rodajas de jengibre fresco o una ramita de canela para saborizarlo. Por arriba: frutas frescas y secas, de todo . Kiwi, frutillas, arándanos, moras...”