Un hombre detenido por tener tres días cautivos a su mujer y a su hijo de dos años

Viviana no aguanta más la situación. Está angustiada por todo lo que está ocurriendo y decide llamar al 911 para denunciar a su propio hijo. Ella sabe lo que pasa en la parte trasera de su terreno, donde vive su hijo con su nuera y su nieto de dos años. Por alguna razón, no dijo nada en todo el fin de semana hasta que el lunes al mediodía dio aviso a la policía. 

En el llamado, Viviana denunció que su hijo Lautaro, que trabaja como tatuador, tiene a su mujer y a su hijo encerrados en la casa. Y no los deja salir. Cuando la policía llega al lugar, en Berisso, encuentra a la nuera de Viviana y a su nieto presos en su propio domicilio, ubicado en la calle 13, esquina 149. 

Según pudo averiguar Clarín, Laurato encerró a su mujer y su pequeño bebé por tres días. Y bajo amenazas y violencia, los mantuvo en cautiverio. Para que no pidieron ayuda, dice el expediente judicial, escondió el celular de la mujer y la tablet del nene. 

Fuentes policiales contaron que Lautaro estaba en su domicilio cuando llegaron los agentes y que se resistió al arresto. Hasta amenazó con una tijera a su mujer durante su detención. 

El caso está siendo investigado por la UFI N° 15, a cargo de la fiscal Cecilia Corfield. Y según se supo, la mujer rescataba presentaba lesiones antiguas, lo que indicaría que sufría violencia de género. 

Desde la Justicia también explicaron que el tatuador, de 20 años, tendría problemas psiquiátricos y que estuvo internado por ese tema en varias ocasiones. También revelaron que en el último tiempo habría dejado de tomar su medicación y que esto habría ocasionado un agravamiento de sus síntomas, llevándolo a tener actitudes violentas contra su propia familia. 

Viviana sabía lo que pasaba. Se supo que le llevaba comida a su nuera y su nieto cuando estaban encerrados y que le pasaba los alimentos por medio de una ventana. Si bien podría ser acusada de encubrimiento, la Justicia decidió excusarla ya que entendieron que no podía hacer otra cosa y que finalmente fue quien denunció la situación a las autoridades.