Desapareció hace un año, hallaron su ropa en un río y ahora investigan restos óseos

Zona de monte. Arroyo Golondrina, debajo del puente El Bonete, en el norte de la provincia de Santa Fe. La bajante del río deja al descubierto la basura que arrastran las aguas. Pero un grupo de cazadores distingue, en el atardecer del domingo y en plena cacería, prendas y restos óseos casi hundidos en un sector de pequeñas islas usualmente anegado. La policía resguarda la zona con inmediatez, tras el aviso. Hacía ya más de un año que los rastrillajes para encontrar a Rosalía Jara, de 19 años, venían dando negativo. Los huesos son de una mujer, coinciden los primeros peritos que arriban hasta el lugar. La escena se preserva hasta la llegada de la luz del lunes, día y momento en que la búsqueda de una familia y un pueblo entero parece haber llegado a su fin: los familiares reconocieron las prendas que vistió por última vez Rosalía. Ahora, resta conocer el resultado de las pruebas de ADN para determinar si es o no la joven desaparecida desde el 1° de julio de 2017.

Desde entonces hubo marchas en la localidad y hasta el gobernador Miguel Lifschitz mantuvo una reunión con los familiares en la Casa de gobierno donde se comprometió a profundizar los esfuerzos por encontrarla.

"Lo más cerca que estuvimos fue a unos 35 kilómetros de ese lugar porque no era la zona que teníamos pensado, en función de los cálculos que se hicieron, que podía estar. Hay que determinar, ahora, cómo estaba el lugar hace un año atrás para delimitar cuál era la situación de esta zona y su acceso. Por otro lado, el sedimento del lugar nos permitirá saber si los restos estuvieron bajo tierra o el cuerpo fue movido a esa zona", explicó Darío Chávez Subsecretario de Investigación Criminal.

Judicialmente, el caso tiene un detenido. Juan Valdez, docente de Educación Física, quien admitió haber mantenido una relación extra matrimonial con la joven desaparecida, que años antes había sido su alumna. Su aporte en la causa es nulo a pesar de ser el principal sospechoso que, hasta el momento, tiene el caso.

"El día de la desaparición, Rosalía llamó a Valdez 14 veces. La última fue a las 22:17 y duró 28 segundos. La comunicación fue minutos antes de la desaparición de la joven", le dijo a Clarín una fuente del caso. A partir de ese momento, el teléfono de ella no emitió más señales. "El dato relevante que aporta el historial del GPS del celular del sospechoso lo ubica a esa hora cerca de un campo, en inmediaciones de un bañado", explicaron los abogados querellantes. Valdez se encuentra detenido sin plazo y acusó a la Fiscalía de persecución.

Cabe recordar que luego de un estudio de ADN realizado el año pasado se conoció que Juan Valdez es el padre biológico de Alma, la hija de Rosalía Jara.

Santa Fe. Corresponsalía.