Un neumático “viejo” y “no apto para la ruta”, la clave para acusar a 5 directivos por la tragedia de Monticas

Cinco directivos de la empresa a la que pertenecían los dos colectivos que el 24 de febrero de 2017 chocaron de frente en la ruta 33, con un saldo fatal de 13 víctimas, quedaron en la mira de la justicia por su responsabilidad en la tragedia vial, una de las peores en la historia de Santa Fe.

El fiscal de la causa pidió este martes que estos cinco empleados jerárquicos sean imputados por el delito de homicidio culposo agravado en calidad de coautores. “Tenían un rol preponderante dentro de la empresa con relación al mantenimiento de las unidades. Las unidades debían salir a la ruta en buen estado. Se comprobó que esto no fue así”, explicó Walter Jurado, a cargo de la investigación.

El Juez Pablo Pinto escuchó los argumentos de la Fiscalía –el expediente cuenta con 186 evidencias- y solicitó un cuarto intermedio para analizar las imputaciones en detalle. Los abogados defensores rechazaron los cargos contra sus clientes por supuestas “imprecisiones” en la carga probatoria.

Las personas para quienes se solicitó la imputación son Juan Antonio C., en carácter de director de Monticas; Pablo César D., en su rol de jefe de Operaciones; Carlos L., jefe de Taller y miembro del directorio; Alejandro L., presidente de Monticas; y Raúl R. en carácter de vicepresidente.

Para el fiscal, el choque frontal de los colectivos se produjo por la explosión del neumático delantero de una de las unidades, el cual no tenía “ninguna falla”, sino que era “viejo” y “no apto para el uso en rutas”.

“Esto provocó, de acuerdo a los expertos, la explosión del neumático, fabricado en 2011 y que se colocó ya usado en el 2017 sobre un tren delantero, con los riesgos que eso implica”, detalló Jurado.

La tragedia ocurrió el 24 de febrero de 2017 a las 10.50 de la mañana cuando impactaron de frente dos colectivos de la firma Monticas en el kilómetro 779 ruta 33. Uno era el interno 145, que circulaba de la localidad de Pérez hacia Zavalla, y en sentido contrario se desplazaba el ómnibus 105. La coalición dejó un saldo de 13 muertos y decenas de heridos.

Tras al accidente, y ante la evidencia graves irregularidades, el gobierno de Santa Fe tomó la decisión de caducar la concesión de la empresa, medida avalada a los pocos días por el poder Ejecutivo nacional que resolvió la suspensión de los servicios en todo el país.

La firma se disolvió meses más tarde. Durante la investigación judicial, el galpón de Rosario donde quedaron muchos de los colectivos de la compañía sufrió dos incendios. En ambas ocasiones se comprobó que el fuego se originó de forma intencional.

Rosario. Corresponsalía.