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      Nueva York se recupera, pero el transporte sigue afectado

      Los vuelos sufren demoras promedio de 5 a 6 horas. También los trenes y micros.

      Nueva York se recupera, pero el transporte sigue afectadoCLAIMA20101229_0004 LIMPIEZA. MAQUINAS QUITANIEVE DESPEJAN UNA DE LAS TERMINALES DEL AEROPUERTO JOHN F. KENNEDY.
      Redacción Clarín
      29/12/2010 00:13

      Los neoyorquinos se recuperan lentamente y con gran esfuerzo del temporal de nieve –uno de los más fuertes de los últimos años– que sufrieron entre el domingo y el lunes. De todas maneras, la normalización de los servicios llevará tiempo.

      Los aeropuertos de Nueva York reabrieron el tráfico tras un día de parálisis, pero operan en forma limitada.

      Más de 5.000 vuelos fueron cancelados en toda la costa este, desde Carolina del Norte hasta Maine, lo que llevó a los autoridades aeroportuarias a advertir que llevará tiempo coordinar los vuelos y que recién el viernes estarían normalizados totalmente. Los aeropuertos JFK, La Guardia y Newark registraban ayer un promedio de 5 horas de demora.

      La ciudad de Nueva York –donde la nevada fue la mayor desde 1948 y alcanzó los 80 centímetros– volvía poco a poco a su ritmo habitual. Según The New York Times , en sus calles se vive una “calma apocalíptica” tras la fuerte tormenta. La red del subtes, así como los micros y trenes, recuperaban sus frecuencias en forma paulatina. La empresa de trenes Amtrak, por su parte, anunció que reanudaba de forma limitada los viajes entre Nueva York y Boston.”Debido a los efectos que persisten de la tormenta, los pasajeros deberán esperar retrasos en sus viajes durante todo el día y dar tiempo suficiente como para llegar a sus respectivas estaciones”, advirtieron.

      Las escenas de máquinas quitanieves, móviles policiales o ambulancias bloqueados por la nieve o el hielo fueron frecuentes en la ciudad, donde los servicios municipales fueron criticados por la lentitud con la que actuaron. Irritado, el alcalde Michael Bloomberg defendió el esfuerzo: “Nadie dice que esto sea fácil. La situación aún es mala y estamos haciendo todo lo que se nos ocurre y de acuerdo a una estrategia determinada”.