Caso Madeleine McCann: en un giro inesperado, un testigo clave podría arruinar la investigación

En su lucha incansable por conocer la verdad, los padres de Madeleine McCann estarían a punto de sufrir una nueva decepción.

Es que el caso contra Christian Brueckner (45), el principal sospechoso del caso según la policía alemana, estaría a punto de fracasar.

Para sorpresa de todos, y tras años sin avances, en 2020 un grupo de fiscales alemanes informó que creían que Maddie -como la llamaba cariñosamente su familia- estaba muerta y que el principal sospechoso del crimen era este abusador sexual infantil.

Caso Madeleine McCann: sospechas, testimonios y ¿falsas? acusaciones

Desde 2020 hasta hoy, las autoridades alemanas colocaron el foco nuevamente en descubrir al responsable de la desaparición de Madeleine McCann.

Tanto así, que en el pasado mes de mayo y a su pedido, se puso en marcha el mayor operativo del caso de los últimos nueve años.

A partir de unas fotos que encontraron en la casa de Brueckner, solicitaron esta operación de búsqueda que se llevó adelante en el embalse de Barragem do Arade, en Portugal, a unos 50 kilómetros donde la niña fue vista con vida por última vez.

Si bien los resultados del operativo no fueron positivos a pesar del enorme esfuerzo de las fuerzas de seguridad, el testimonio revelador de un examigo del abusador mantenía vivas las expectativas de las autoridades y la familia.

Helge Busching, tal es el nombre de este informante, se acercó a la policía por primera vez en 2017 para decir que tenía información sobre el caso de personas desaparecidas de alto perfil.

Entre otras cosas, este hombre -que asegura que se peleó con Brueckner por un tema de drogas- había dicho que al hablar del caso de la pequeña, el abusador sostuvo que: "Ella no gritó".

Sin embargo, la causa dio un nuevo giro. Helge Busching ahora amenaza con no ayudar más a la fiscalía y el caso que intentan armar los funcionarios alemanes podría desmoronarse.

“Se dice que Busching está a punto de retirar sus pruebas. Le pagaron una suma enorme por repetir su declaración en un periódico alemán y ahora está desconectado. Simplemente sirve para mostrar con qué tipo de personas están tratando y su credibilidad como testigos”, le dijo una fuente a The Sun.

La policía y los fiscales alemanes estaban "electrizados" por las declaraciones de este hombre que, en realidad, parecían hechas "casi a medida" del interés de los funcionarios.

Sin embargo, Brueckner -que está detenido por la violación de una mujer de 72 años que tuvo lugar en Portugal en 2007- siempre negó participación el secuestro.

Cómo fue el caso de Madeleine McCann

Era el 3 de mayo de 2007. Maddie -como la llamaban cariñosamente- dormía en el departamento 5A del complejo Ocean Club, en Praia da Luz, Portugal. Compartía el cuarto con sus hermanos. Ella tenía 3 años; los mellizos Sean y Amelie, 2.

Kate y Gerry McCann, sus padres, cenaban con amigos en "Tapas", el restaurante del centro vacacional, a unos 50 metros de la habitación.

Habían llegado allí a eso de las 20:40 y cada 20 minutos se turnaban para ir a vigilarlos y comprobar que todo estuviera bien.

Alrededor de las 22, tras una de esas visitas, la mamá de la pequeña regresó llorando y gritando a la mesa. "Se la llevaron", repetía una y otra vez.

Las soñadas y esperadas vacaciones familiares se habían convertido en una pesadilla. De la que hasta ahora no han podido despertar.

A partir de ese preciso momento, todo se convirtió en una madeja de versiones contradictorias, sospechas, pistas falsas y teorías conspirativas que hasta llegaron a culpar a los propios padres de Madeleine de haberla asesinado.

Los números hablan por sí solos. En el marco de la investigación se realizaron unos 600 interrogatorios, más de 2.000 diligencias policiales, 500 búsquedas en la zona del hecho y cerca de 10.000 "avistamientos" de la niña en todo el planeta.

Sin embargo, y a pesar de los esfuerzos de las policías portuguesa y británica, el caso nunca pudo resolverse. Y el enigma sobre lo que le pasó a Madeleine McCann -que ahora tendría 19 años- aún persiste.