Juicio por la muerte del hijo de Federico Storani: 9 años de prisión para el conductor de la lancha

Después de siete años de espera, el Tribunal Criminal N°1 de San Isidro condenó este viernes al mediodía a Pablo Torres Lacal (55), por unanimidad, a 9 años de prisión, por el homicidio simple con dolo eventual de Manuel Storani (14) y de su madre, María de los Angeles Bruzzone (45), en un choque de lanchas en el Delta del Tigre, en marzo de 2016.

El tribunal compuesto por los jueces Sebastián Hipólito Urquijo, Alberto Ortolani y Gonzalo Aquino leyó el veredicto después de las 13.50. Luego llegó una explosión de emociones, llantos y abrazos en el sector de la sala donde se ubicaron los familiares de las víctimas.

“El veredicto es un bálsamo para la familia, porque realmente ahora algo pueden componer de la angustia por la que han pasado”, dijo el abogado de la querella, Carlos Acosta, en la antesala del tribunal, ubicado en la calle Ituzaingó 340, de San Isidro.

Los jueces decidieron que la condena de Lacal fuera de cuatro años menos que lo que pedía la querella. “Estamos satisfechos con lo que se resolvió, que fue por dolo eventual. Lo importante es el resultado. Fue lo que esperábamos, además de que se ordenó la detención cuando el fallo quede firme en Casación, porque nuestro temor era que se pusiera la sentencia y la detención fuera remota”, agregó Acosta en diálogo con Clarín.

Aunque se determinó que Torres Lacal permanecerá en libertad hasta que finalice el proceso de apelación del fallo, también se dispuso que no podrá abandonar el país ni dejar su domicilio por más de 24 horas. Lacal llegó en libertad al juicio, y durante todo este tiempo realizó varios viajes al exterior.

“No puedo estar contento porque nadie me va a devolver la vida de Emanuel ni de Ángeles”, afirmó Federico Storani. El dirigente radical consideró que “la finalidad de la pena es preventiva, disuasiva, pero también tiene que ser ejemplificadora”.

“Lacal venía a la máxima velocidad de una embarcación muy potente, en un lugar donde prácticamente no había luz, haciendo zigzag y habiendo sido advertido previamente por un playero. Partió por la mitad a la lancha donde lamentablemente iban Manu y Ángeles”, agregó.

“Intentaron chicanear todo el tiempo”, dijo Storani respecto de la defensa de Lacal, y agregó: “Si una persona se proclama a sí misma inocente, quiere llegar cuanto antes a un veredicto, para estar tranquilo con su conciencia, para que no le pesen tres muertes. No se la pasa presentando recursos. Ni siquiera tuvo empatía con quien decía que era su amigo, que fue la tercera víctima fatal".

“Peleamos y peleamos mucho. Nunca hay que bajar los brazos, siempre hay que pelear”, finalizó su relato Storani, con emoción y la voz casi entrecortada.

Durante la lectura del veredicto, Torres Lacal permaneció serio y con la mirada fija en los jueces. Algo parecido sucedió con Storani, sentado del otro lado junto a sus abogados. No participó de la explosión de gritos, llanto y algún aplauso que provocó la sentencia. Y recién pareció dejarle lugar a la emoción cuando se pudo abrazarse con sus familiares.

El fiscal Diego Callegari había pedido 12 años de prisión. Mientras que Acosta reclamó en su alegato 13 años.

En sentido contrario, los abogados de Lacal, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, sostenían que lo correcto era la absolución ante el Tribunal, por lo que realizarán la apelación correspondiente de la pena. En todo momento intentaron echarle la culpa del choque de lanchas a Lucas Sorrentini, el otro timonel que manejaba la embarcación en la que iban Manuel Storani y Ángeles Bruzzone, su mamá. Aseguró que el hombre violó 3 reglas RIPA (Convenio sobre el Reglamento internacional para prevenir los abordajes).

El hecho

El 31 de marzo de 2016, Manuel Storani, de 14 años, viajaba junto a su mamá, María de los Ángeles Bruzzone, y otras cuatro personas en una lancha que -cerca de las 23- fue violentamente embestida por otra embarcación conducida por Torres Lacal, “que venía a velocidad máxima y haciendo zigzag”, según testimonios de los testigos.

De la investigación judicial también se desprende que, al momento del impacto, la visibilidad era prácticamente nula.

Como consecuencia del choque, murieron Francisco Gotti (el amigo del acusado), que viajaba en la lancha conducida por Torres Lacal, Bruzzone mientras era trasladada al centro de salud de la zona, y Manuel, cuyo cuerpo fue encontrado en el Río Luján tres días después.

SC